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Ahorra tiempo y costes automatizando la intralogística

¿Qué es la intralogística?

En la era de la inmediatez, del querer y tener, en la que es obligado contar con un sistema ágil de flujos logísticos para satisfacer al cliente, cada vez toma más relevancia la intralogística.

¿Qué es la intralogística?

El concepto que nos ocupa en esta entrada, ha despuntado en los últimos años con la explosión del comercio electrónico, y hace referencia a los procesos que atañen a la logística interna, que iremos viendo a lo largo de estas líneas con más detalle.

Tradicionalmente se han puesto esfuerzos y recursos en la paulatina mejora de los medios y modos de transporte de mercancía. Minimizar tiempo, recorrido, unidades de flota… han sido los grandes retos durante décadas. Posteriormente, el nacimiento y auge del e-commerce desvelaron la gran potencialidad de la mejora de los procesos internos de almacén.

Ese punto es en el que se centra la intralogística, que hace referencia, como su propio nombre indica, a todos los movimientos de materiales o productos que se realizan dentro de la propia empresa, desde la recepción de la materia prima, hasta que el producto está preparado y gestionada su salida hacia el cliente.

El aprovechamiento del espacio, la colocación, los sistemas de localización y movilidad interior, la trazabilidad del producto, o los procedimientos administrativos necesarios para la validación de salidas y gestión de destinos, forman parte de esos procesos intralogísticos a los que hay que prestar especial atención, como medios de optimización y mejora de la cadena de suministro.

Como vemos, el concepto de intralogística es extenso, puesto que no se centra únicamente en la organización y desempeño del almacén, sino que se extiende, como estamos viendo, a todo tipo de movimiento interno de materiales y a las gestiones que llevan a parejadas, desde el mismo momento en el que la materia prima es recepcionada.

Y, ¿qué es la intralogística 4.0?

Como todos los procesos 4.0, la intralogística 4.0 consiste en la automatización de procesos para conseguir mayor eficiencia, celeridad, seguridad y rentabilidad. La rápida evolución de la Ciencia de Datos y de la Inteligencia Artificial ha posibilitado llevar la transformación digital a todas las operativas empresariales, y la logística interna no es una excepción.

Los almacenes han dejado de ser espacios desordenados en los que cumplir el trámite de espera entre la producción y la salida del producto. Ahora son verdaderos centros de distribución de mercancías en los que se hace imprescindible aprovechar cada centímetro de espacio disponible, contar con un buen sistema de localización de producto, desarrollos para la movilidad internas, y herramientas de explotación del dato que faciliten la gestión de stock.

Automatización de la intralogística

Si empezamos por lo más básico, el almacenamiento de mercancía, la primera idea que se nos viene a la cabeza es la gestión del propio espacio, aprovechar al máximo la capacidad de las infraestructuras. En esta tarea son fundamentales las potencialidades de la Inteligencia Artificial y el Big Data, que permiten el desarrollo de planificadores con los que organizar los productos optimizando el espacio, ganar tiempo en desplazamientos internos, que los artículos sean fácilmente localizables, y que se garanticen los flujos y la rotación.

En este sentido, los sistemas de lectura de códigos, conteo automático con visión artificial, localización de mercancías o trazabilidad de producto son grandes aliados de los planificadores, ya que permiten el control total de las referencais en el conjunto de los procesos intralogísticos, es decir, en el conjunto de las fases por las que atraviesa la logística interna.

Colocados e identificados los productos y las materias primas, la automatización de procesos facilita también su movilidad por las instalaciones de forma rápida y segura. Como estamos viendo, la gestión de almacén es mucho más eficiente con el apoyo de la tecnología, hasta el punto de que grandes centros de distribución como Amazon realizan su distribución interna con cintas transportadoras inteligentes, en los que ya se han dado en llamar almacenes inteligentes o almacenes 4.0.

Tenemos que tener también en cuenta que la intralogística sufre las tensiones del mercado: picos de demanda, caídas de ventas, promociones, estacionalidad, etc. aspectos que deben de ser tenidos en cuenta para guiar la correcta gestión de los procesos logísticos internos. En este sentido, los sistemas predictivos como las herramientas de predicción de la demanda, mantenimiento predictivos o los gemelos digitales, ayudan a los equipos a adelantarse a lo que sucederá estableciendo previsiones a determinado tiempo vista.

De este modo, se cuenta con predicciones altamente fiables de la cantidad de producto que saldrá de los almacenes en una determinada franja temporal, lo que simplifica la toma de decisiones y permite adecuar el stock a las circunstancias que hemos reseñado. Se consigue así una gestionar las entradas y salidas de referencias que parte de datos objetivos, sin tomar como base la experiencia subjetiva de pasadas campañas.

Pero todo esto debe de ir acompañado de una correcta gestión de todos los eslabones logísticos de la supply chain, punto en el que entra en juego la Automatización Robótica de Procesos o RPA (Robotic Process Automation). Gracias a la inteligencia artificial y al aprendizaje automático (machine learning)  se pueden resolver grandes volúmenes de tareas de escritorio. Se simplifican y eficientan, así, labores administrativas de cualquier tipo, también las asociadas a la gestión logística, de alta repetición y bajo valor añadido (albaranes de entrega, facturación, e-CMR…).

Inteligencia Artificial, Big Data e intralogística

Como hemos visto, el desarrollo de la Inteligencia Artificial y la Ciencia de Datos ha revolucionado también la logística interna. La automatización de procesos y el avance hacia la industria 4.0 está permitiendo avanzar hacia unos modelos de empresa mucho más eficientes, ágiles, flexibles y rentables, con una enorme capacidad de afrontar los avatares de un mercado globalizado y cambiante.

La logística se está demostrando como un elemento principal en el mantenimiento de los ratios de satisfacción del cliente, basados, fundamentalmente, en calidad del producto y tiempo de entrega, y más en el momento que vivimos de auge del comercio electrónico. En este marco, agilizar los procesos logísticos internos a través de su automatización, es fundamental de cara a que las empresas continúen siendo competitivas en mercados cada vez más complejos.